Con cierta tecnología, el éter de celulosa se produce en masa con usos prácticos, por ejemplo, en forma de polvo, para usarse como agente de retención de agua, espesante, adhesivo y estabilizador. Este material se puede modificar en varios productos derivados como carboximetilcelulosa (CMC), metilcelulosa (MC), hidroxipropilmetilcelulosa (HPMC), hidroxietilcelulosa (HEC), hidroxipropilcelulosa (HPC) y etilcelulosa (EC).